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«Susana Baca» Susana Baca

Perú

Música afroperuana

1997

Luaka Bop

Susana Baca nació el 24 de mayo de 1944 en Lima, Perú, en una familia profundamente arraigada en la tradición de la música afroperuana. Desde su infancia, estuvo rodeada de músicos: su padre era guitarrista, su madre bailarina y sus primos fundaron el influyente grupo Perú Negro, lo que la influenció profundamente para dedicarse a la música. Formó un grupo de música experimental que fusionaba la música tradicional con poesía local, mostrando su interés por explorar y preservar las raíces musicales peruanas.

La carrera de Susana Baca alcanzó fama internacional gracias a su dedicación y talento. En 1995, el músico británico David Byrne, ex-integrante de Talking Heads, descubrió su música por una recomendación a través de un video grabado por un argentino en 1986 durante un festival en Lima. Impresionado, incluyó sus canciones en una compilación de su sello discográfico Luaka Bop, lo que marcó el inicio de una colaboración fructífera.

Susana Baca reconoce la influencia significativa de Violeta Parra y Chabuca Granda en su carrera. Chabuca Granda, una figura emblemática en la música peruana, fue mentora y amiga cercana de Susana, considerándola su sucesora en este ámbito. Su voz combina determinación con una cualidad etérea, explorando temas como el trabajo, el baile y el orgullo negro, en ritmos como zamba, festejo y landó, con compases como 6/8 o 12/8, distintivos de la música peruana.

El álbum de Susana Baca de 1997 representa un punto culminante en la carrera de esta destacada cantante peruana, fusionando de manera magistral las tradiciones musicales de su país con un acompañamiento minimalista que permite que su voz resuene con claridad y emotividad. Con canciones como «Negra presuntuosa», que ha sido destacada en numerosas compilaciones de música mundial, el álbum se posiciona como una joya en el género afroperuano y más allá.

Desde el inicio con «Negra presuntuosa», donde el cajón y la guitarra establecen un ritmo enérgico que acompaña la voz poderosa de Baca, hasta piezas como «Zamba Malató», que revitalizan la música folclórica peruana con su interpretación única, cada canción es una exploración profunda de las raíces culturales y musicales de Perú. La influencia sutil pero significativa en la instrumentación se entrelaza con la voz de Baca, añadiendo capas de complejidad y belleza a cada composición.

Las letras, como las reflexiones poéticas de «Heces» (basado en textos de Noel Nicola y César Vallejo), profundizan aún más en temas universales de memoria, nostalgia y el poder transformador del ritmo. Como Susana Baca misma expresa, la música no solo mueve el corazón con su cadencia y melodía, sino que también tiene el poder de contar historias ancestrales y mestizas, de conectar el pasado con el presente y de celebrar la libertad a través de su ritmo y expresión.

El álbum no solo destaca por la voz emotiva y técnica impecable de Susana Baca, sino también por la habilidad de crear un ambiente donde cada instrumento, ya sea el cajón, la guitarra, o la flauta andina, contribuye de manera integral a la atmósfera musical. La dirección musical de David Pinto, miembro de Perú Jazz, ayuda a mantener la cohesión y el impacto emocional de cada pista.

El disco es un testimonio vibrante de la riqueza musical y cultural de Perú, interpretado con pasión y maestría, elogiado por su calidad y la capacidad de Baca para conectar con el público. Activa en la promoción de la música afroperuana a nivel global, destaca por su compromiso con la cultura y la educación, siendo una figura respetada.

José Luis Mercado