Nieta de esclavos, María Teresa comenzó a cantar a los 16 años y llegó a presentarse en el Teatro Apollo de Nueva York, ciudad a la que viajó cinco veces a grabar desde los años veinte. Tal era la fama que cultivó durante la primera mitad del siglo XX. Fama que se ganó con su talento como compositora, guitarrista y cantante, como una de las voces más importantes de la trova, un campo dominado por hombres en esos viejos años veinte, treinta y cuarenta. María Teresa fue, como dijo Pablo Milanés, la “encarnación de la canción cubana”. Su carrera incluyó trabajos en solitario, dúos junto a Rafael Zequeira y Lorenzo Hierrezuelo, y su propio Sexteto Occidente, junto a Miguel García e Ignacio Piñeiro, entre otros.
María Teresa Vera nos dejó centenas de grabaciones y composiciones, muchas de las que se reúnen en The Cuban Legend, que comienza con “Veinte años”, uno de los temas más importantes del cancionero cubano. Tan importante que cuando Omara Portuondo entró por primera vez al estudio de grabación en el que estaban los músicos de Buena Vista Social Club y eligió cantar esta canción, todos los músicos la tocaron de memoria. Esta compilación incluye también otras importantes grabaciones de María Teresa, como “En la alta sociedad”, “Sobre una tumba una rumba” y la inmortal “Lágrimas negras”, original del Trío Matamoros