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«El Dorado» Aterciopelados

Colombia

Rock - Rock alternativo

1995

BMG

En la Bogotá de los años noventa el panorama musical era un desierto sin ensayaderos, ingenieros de sonido ni infraestructuras que la sostuvieran. Las convocatorias para los toques se limitaban a afiches pegados con engrudo en diferentes puntos de la capital. En lugar de riffs y acordes, la ciudad se estremecía con la violencia del narcotráfico y la incertidumbre provocada por las constantes explosiones de bombas. En aquel entonces, Bogotá figuraba entre las ciudades más peligrosas del mundo. En este entorno adverso, la escena punk intentaba mantenerse, enfrentándose a la escasez de lugares para tocar. Los caóticos «pogos» a menudo terminaban en peleas y sillas rotas, reflejando la intensa y violenta energía del ambiente.

Aunque ya existían bandas de rock en Colombia, la mayoría se limitaba a hacer covers de éxitos internacionales y faltaban cantantes originales en la escena local. En un momento en que el epicentro del rock latinoamericano parecía consolidarse en Argentina, México, Brasil y Chile, surgió una banda inicialmente conocida como Delia y los Aminoácidos, que luego cambió su nombre. Hoy, esta banda se ha convertido en un emblema del rock alternativo y pionera del rock colombiano a nivel mundial: Aterciopelados.

Creado por Andrea Echeverri y Héctor Buitrago, El Dorado, su segundo álbum de estudio, desafió los estereotipos musicales de la época, buscando una autenticidad que contrastaba con la tendencia hipersexualizada dominante del siglo XX. El álbum no sólo nos transporta a la mítica leyenda, sino también a la riqueza espiritual precolombina. Sus letras exploran la conquista —o, en términos menos eurocéntricos, la colonización— y la profunda esencia cultural de nuestra tierra. Además encapsula la esencia de Aterciopelados, evocando los coloridos vehículos de transporte público típicos de Bogotá, decorados con terciopelo y crucifijos. Esta combinación ecléctica y esotérica define un estilo kitsch pero elegante, reminiscente de las obras de Andy Warhol. 

Andrea y Héctor, sin formación académica musical, se destacaron por su audacia al fusionar diversos estilos sin miedo alguno. Para los oídos del mundo, sus composiciones resultaban «rarísimas», pero igualmente intrigantes. Con ritmos desafiantes y crudos, su álbum El Dorado mezcló rock alternativo, rock & roll, pop-rock y punk.

La trascendencia de la banda fue notable no solo por su innovador estilo musical. Andrea, la voz y el rostro femenino de la banda, se convirtió en un símbolo de resistencia. La industria musical en general y el rock en particular, son predominantemente dominados por hombres, tanto en términos de músicos como ejecutivos. Su liderazgo fue clave para el crecimiento descomunal de Aterciopelados y marcó un hito en la visibilidad y representación de las mujeres en la música latinoamericana. Aunque el equilibrio de género en la industria sigue siendo un desafío, la presencia de Andrea abrió nuevos caminos para las mujeres en un terreno históricamente controlado por hombres.

El álbum está lleno de sencillos que se han quedado en la memoria colectiva: «Florecita Rockera» considerado uno de los clásicos del rock en español, «Bolero Falaz» una fusión de bolero y rock, influenciado por el estilo «santanesco» con un toque colombiano; que entrelaza con humor en frases como «Te dije no más, y te cagaste de risa», controversial en su época y censurada por algunas emisoras. Añadido a eso, la pieza transmite un mensaje de «Peace and love», contrastando con el dramatismo usual de los boleros tradicionales. La producción musical incluye 16 canciones, con el bonus track «Mujer Gala» que les aseguró su primer número uno en la radio nacional y su primer contrato discográfico.

Angie Rojas