A principios de los años noventa surgió en Recife el movimiento manguebeat. El movimiento fue una reacción cultural que tuvieron algunos músicos como Fred 04, DJ Renato L y Chico Science entre otros contra el estancamiento económico y cultural en el que se encontraba su tierra natal. Aunque los artistas no tenían una unidad estética en su música, se unieron para revivir la escena musical local y mostrar a otros que había un camino a seguir. Fred 04 y DJ Renato L llegaron incluso a crear su propio Manifiesto titulado «Caranguejos com Cérebro” en el que detallaron su objetivo de mezclar sonidos regionales de Pernambuco con tendencias globales como la electrónica, el rock y el hip hop.
De esta fusión surgió una de las bandas más importantes nacidas en Brasil durante los años noventa. Chico Science y la Nação Zumbi. La banda se formó a partir de la union de la banda de post-punk Loustal y la banda de afoxe y samba-reggae Lamento Negro. Elegirían el nombre Nação Zumbi como homenaje al líder esclavo Zumbi pero también a la nación zulú de DJ Afrika Bambaataa. Dentro de la fusión de ritmos que lograron quisieron darle preponderancia al maracatu nação que es considerado por muchos como el ritmo afrobrasileño más antiguo. Rápidamente captaron la atención de los fans locales y de los sellos discográficos. Firmaron con Sony y fueron asignados a trabajar con el veterano productor Liminha en su álbum debut Da lama ao caos.
Su álbum debut es considerado un momento trascendental en la música brasileña moderna. El dominio cultural de Río y Sao Paulo se vería cuestionado por este nuevo sonido local del nordeste como ya había ocurrido antes con Luiz Gonzaga, Gilberto Gil y Caetano Veloso, entre otros. La primera línea del álbum, «Modernizar o passado é uma evolução musical», es básicamente su manifiesto para el oyente. Tomarían su historia y le darían un toque moderno. A diferencia de muchas de las bandas brasileñas de los ochenta que buscaban inspiración fuera de Brasil, ellos miraban hacia adentro. Como la letra en «Da lama ao caos» está explícitamente clara, estaban desorganizando los ritmos para reorganizarlos en nuevos estilos y géneros. Uno de los puntos fuertes del álbum es que, aunque hay una intención clara en la letra, nunca resulta en un sermón. Chico Science pudo abordar las dificultades que enfrentó en Recife con un tono alegre. En una canción como «A Praieira» recuerda los beneficios que la playa y la cerveza pueden tener para la claridad mental y al mismo tiempo hace referencias históricas a la revuelta de Praieira del siglo XIX.
Todas estas ingeniosas letras fueron acompañadas por los tonos únicos de guitarra de Lúcio Maia, el bajo contundente de Alexandre Dengue y la diversa sección de percusión (Toca Ogan, Canhoto, Gira, Gilmar Bola 8, Jorge Du Peixe) cuyos ritmos implacables son la fuerza impulsora en todo momento de todo el álbum.